Animal Culture: Desde que hay aviones los dioses casi nunca se tumban sobre las nubes para vernos jugar...

Desde que hay aviones los dioses casi nunca se tumban sobre las nubes para vernos jugar...

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Las nubes, océano de algodones esponjosos que cubren nuestros cielos, era el lugar favorito de los dioses.

Incluso Mari cada vez que volaba del monte Anboto a su otra casa en el monte Txindoki, cruzaba los cielos como una luz brillante, pero en ocasiones hacía pequeñas paradas sobre las nubes para tumbarse y descansar, y charlar animadamente con otros dioses conocidos.

Lo que más les gustaba era observar la tierra, y disfrutaban mucho viéndonos jugar.

Los animales humanos, en la tierra, sin saber que ellos nos observaban, jugábamos tranquilos y a gusto, desde pequeños. Descubriendo nuestro mundo a través del juego, llegamos incluso a crear cosas nuevas sobre la tierra, entre ellas, los aviones.

El día que el primer avión voló sobre las nubes, Mari andaba tumbada sobre una nube, esperando la visita de un dios amigo.

Flotaba sobre una nube relajada y despreocupada cuando cerró los ojos por un instante.

Un ruido ensordecedor la sobresaltó y la obligó a incorporarse, sus ojos de diosa no daban crédito al objeto enorme que se dirigía directamente hacia ella. Era un avión.

Había observado a animales humanos jugar, y crear aviones, pero nunca había pensado que conseguirían hacerlos volar.

Antes de que el avión se estrellara contra ella, voló con rapidez descendiendo hasta el monte más cercano.

Su amigo no tuvo tanta suerte, justo en ese momento, él llegaba al lugar, y se encontró de cara con el primer avión que sobrevolaba los cielos. El golpe fue tal, que el primer avión calló en picado estrellándose en la tierra.

Es por ello, que desde que hay aviones los dioses casi nunca pueden tumbarse sobre las nubes para vernos jugar…

Desde pequeños jugamos, y a través del juego no sólo nos divertimos, sino además descubrimos, nos ilusionamos, desarrollamos nuestra imaginación, soñamos, aprendemos, compartimos, reímos, sentimos, proyectamos, e incluso creamos...

¡¡Nunca dejéis de jugar animales humanos!!

Texto: Animal Culture ( Jesika Martinez-Alcocer)
Fotografía: Animal Culture ( Jesika Martinez-Alcocer y Eduardo Acebedo.)